Hifu FocuShape V4 es la mejor  técnica no invasiva para destruir las células adiposas.  Emplea ondas de ultrasonido   para localizar y reducir los depósitos de grasa de diferentes zonas corporales.  Reduce sustancialmente cintura, el diámetro de muslos y mejora sustancial la imagen corporal.  Este sistema también emplea Radiofrecuencia asociada a Vacumterapia para optimizar la destrucción de las células adiposa y, eliminar con mayor velocidad y efectividad la grasa de nuestro organismo y tonificar la piel. 

El HIFU tiene  una cámara con la que enfocamos hacia la zona que se va a tratar y que refleja la imagen en una pantalla. Sobre esta pantalla hacemos un dibujo marcando los puntos donde vamos a trabajar. El aparato hace un análisis de la grasa acumulada en la zona que hemos marcado  y  nos indica exactamente donde tenemos que trabajar encajando las pulsaciones de ultrasonidos HIFU con los puntos de la  imagen.

En los últimos tiempos, la cavitación se ha hecho muy popular para eliminar los pequeños depósito de grasa, que no se consiguen eliminar ni con dietas, ni con ejercicios, ni con otros tratamientos tradicionales.

La cavitación consiste en generar controlada y repetidamente micro-burbujas en el interior del tejido adiposo. Este método, aplicado a la grasa corporal, consigue romper la estructura de los depósitos grasos localizados que suelen resistirse a las dietas y el ejercicio físico. Una vez destruidos estos depósitos, se puede eliminar la grasa a través del sistema linfático, luego por la orina y también con algún ejercicio físico o electro-estimulación.

La radiofrecuencia son radiaciones electromagnéticas que oscilan simultáneamente en el campo eléctrico y magnético. Últimas investigaciones han conseguido desplazar su uso al campo de la estética al crear una tecnología capaz de aplicar la energía de la radiofrecuencia selectivamente en la dermis profunda y en las capas subdérmicas mientras se protege la epidermis y así poder luchar contra la flacidez y la celulitis.

¿Cómo actúa la radiofrecuencia?

La radiofrecuencia produce un calentamiento profundo que afecta a la piel y tejido graso subcutáneo. Un calentamiento que podríamos decir va de dentro hacia fuera. Dicho calentamiento va a favorecer:

• El drenaje linfático, lo cual permitirá disminuir los líquidos y las toxinas en el que se encuentran embebidos los adipositos del tejido afecto de celulitis.
• Un aumento en la circulación de la zona que permitirá mejorar el metabolismo del tejido graso subcutáneo como optimizar el aspecto de la piel acompañante.
• La formación de nuevo colágeno, tanto en la piel como en el tejido subcutáneo, permite que todo el tejido adquiera firmeza gracias a la reorganización de los septos fibrosos y engrosamiento dérmico suprayacente.

Y por último tras la lesión térmica controlada con retracción del tejido hay una respuesta inflamatoria que se verá acompañada de migración de fibroblastos, lo cual reforzará aún más la estructura de colágeno, dando como resultado un rejuvenecimiento de la zona tratada.

El efecto inmediato de la aplicación de radiofrecuencia es la retracción del colágeno, con más o menos rapidez según los casos. Sin embargo, lo que se pretende conseguir gradualmente es la reestructuración del colágeno profundo, lo que incluye que se formen fibras nuevas que sustituyan a las envejecidas y se hagan los tejidos más elásticos, se favorezca la homeostasis y, en general, mejore el estado de la piel eliminando de ella las huellas del paso del tiempo. Este proceso es más lento y, según los casos y dependiendo del estado en el que se encuentre el colágeno de la persona, se produce entre los dos y cuatro meses posteriores al tratamiento. De hecho se han realizado estudios histológicos que demuestran cambios importantes en la remodelación del colágeno a partir de la sexta semana posterior a la aplicación de la radiofrecuencia.

Consiste en la estimulación eléctrica de grupos musculares para tonificar, dar elasticidad y endurecer el músculo por contracciones isométricas. La electroestimulación sigue un mecanismo que va desde los tejidos más internos del organismo hasta los más externos. Las zonas en las que se puede aplicar la electroterapia son múltiples: glúteos, caderas, estómago, piernas y brazos.

Es una técnica avanzada para la eliminación de grasa localizada que destruye el tejido adiposo sin necesidad de cirugía. La técnica de la criolipólisis, que ofrece resultados iguales a la liposucción, se basa en un descenso de la temperatura de la grasa localizada hasta los 0°C durante 30 minutos. De esta forma, las células del tejido graso, denominadas adipocitos se destruyen por la cristalización y posterior eliminación gradual de lípidos durante un período de entre dos y seis semanas. Se debe hacer una sesión por mes y se recomienda tomar de dos a tres sesiones para completar el 100% del tratamiento de crilipólisis.

La ultracavitación ayuda al adipocito a eliminar la grasa almacenada en su interior pero no llega a eliminarla al 100%, y si aumenta de peso la persona existe la posibilidad de recuperar la grasa perdida con el paso del tiempo, la crolipólisis completa el tratamiento de la ultracavitación al destruir el adipocito sin posibilidad de volverse a almacenar en la zona tratada ni generar nuevo tejido adiposo.

Este equipo complementa la ultracavitación ya que genera poros en la membrana celular del adipocito (célula que almacena grasa) a través de los cuales se drenan los ácidos grasos de las células que aún almacenan grasa en la zona donde se está aplicando el tratamiento. La terapia de láser-lipólisis, es una técnica indicada para tratamientos:

Obesidad en piernas, muslos, glúteos, brazos, abdomen, espalda, papada y ginecomastia (acumulo de tejido adiposo en mamas hombre)
Lipodistrofías (celulitis)
Moldeo corporal
Pre y post operatorio
Atonía cutánea corporal (flacidez)

Consiste en la colocación de una serie de dispositivos inflables  sobre miembros superiores, glúteos, abdomen y miembros inferiores. Este equipo en conjunto se llena y se vacía con el aire, generando presión desde los pies hacia el resto del cuerpo.

Con esta técnica se activa la circulación mediante la presión en diferentes zonas del cuerpo, se bombean los líquidos y la sangre, produciendo un efecto de drenaje linfático, que ayuda a eliminar toxinas y grasas acumuladas en las zona tratadas.

¿Qué diferencia hay con otros tratamientos corporales?

1. Vendas frías y calientes van a producir una deshidratación transitoria de la piel y no va a verse un efecto a largo plazo.
2. Masajes reductores: igualmente producen reducción de medidas transitorias mientras se realicen los masajes.
3. Yesos estéticos: Se produce una reducción de medidas por deshidratación o disminución de tono muscular más no por una reducción de la grasa y tonificación de piel.
4. Mesoterapia: La administración de sustancias que usted desconoce puede traer problemas de salud. Además existe riesgo de infección, alergias, equimosis (moretones), etc.
5. Carboxiterapia: La aplicación de CO2 en el área subdérmica es sumamente dolorosa y no está comprobada su utilidad pues si el cuerpo elimina CO2 que es un producto de desecho mal haríamos en administrar esta sustancia dentro de nuestro cuerpo.

Requisitos para poder realizarse los tratamientos corporales

En cualquier lugar donde usted  decida realizarse un tratamiento corporal debe tener en cuenta lo siguiente:

1. Conocer como se encuentran sus valores de triglicéridos, enzimas hepáticas y función renal.
2. Debe haber pasado 3 meses luego de una cesárea y al menos 1 mes luego un  parto normal
3. Le deben abrir una Historia Clínica donde le pregunten sus antecedentes personales  en cuanto   a enfermedades para determinar si  para alguno de ellos estaría contraindicado algún procedimiento.
4. Se le debe tomar signos vitales  y parte de ello es fundamental  la medición de la  presión arterial.

Todo lo anterior deber ser evaluado por un Médico para poder establecer la idoneidad de los tratamientos en cada persona.  Luego de que inicie el tratamiento corporal es importante también la supervisión médica de las cosmetólogas que aplican el tratamiento.  Yo como Médico especialista en Nutrición siempre hago hincapié en la importancia de que estos tratamientos siempre vayan de la mano de un seguimiento médico para evitar cualquier complicación.